Cuando yo tenia mi nariz y mis piés normales todo era
diferente refunfuñaba siempre que le criticaban por sus piés gigantes y su
nariz grande. Pipiolo era un niño muy avaricioso pero cuando se decía
avaricioso se quería decir exageradamente avaricioso.
Todos los niños le tenían miedo porque además de quererte
quitar tus juguetes se metía contigo. Pero un día eso cambió, porque, una niñita
llamada Sabrina, muy astuta fué a visitar a un mago . Un mago que vivía en
los Alpes, le pidió consejo y prepararon
un hechizo. Cuando volvió todo cambió, Pipiolo no avía salido de casa desde dos
semanas atrás y la tranquilidad estaba en el pueblo. Todos se preguntaban que
abría echo Sabrina para conseguirlo, pero ella no se lo dijo a nadie menos a
Pipiolo. Le dijo también que el debía encontrar la manera de que el hechizo se
marchara, que el mago le dijo que sinó, no aprendería.
Cuando salió a la calle con esos gigantes piés y esa nariz
grande los niños no pararon de burlarse de el y el se sintió muy mal , en ese
momento, supo que no estuvo bien lo que hacia, esto es tomarle el pelo a los
demás.
Cuando llego navidad la gente le seguía tomando el pelo muy repetidamente . Volvió a casa y
se dió cuenta que tenía todos esos juguetes ahí además de que eran de otra
gente, se sintió muy mal . Salió a la calle con esos regalos en un saco y los
repartió por todas las casas, al siguiente día cuando se despertó se miró al
espejo y los piés y la nariz avían reducido su tamaño exageradamente. Salió a
la calle y todos los niños del pueblo lo estaban esperando para darle las
gracias.
En ese momento supo que no se deve quitar los juguetes ni
nada a nadie aunque sea el más indefenso, que se deve dar para recibir y que la
navidad consiste en eso, en hacer feliz a la gente que te rodea y lo necesita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario